Procede de la antigua iglesia de San Juan de Dios, donde fue donada por el padre de la orden Juan Bartolomé Sanz Arroyo, ya era venerada en su propia celda del convento, la trajo de Granada y la cedió al convento en 1675. La imagen compartió capilla con la Virgen Concepción Dolorosa y la Oración del Huerto, ambos titulares de una desaparecida cofradía, con la que hacía estación de penitencia, saliendo de la citada iglesia de San Juan de Dios, quizás el Jueves Santo.

Estas imágenes todavía existen y acompañan a Jesús Preso o de las Prisiones en su salida procesional la tarde del Jueves Santo. Una de ellas con el título de Nuestra Señora de la Esperanza, y la otra con el de Jesús en la Oración en el Huerto. En los primeros años de la fundación de la Hermandad del Señor de las Prisiones en sus primeras salidas procesionales también le acompañó esta imagen del Señor de la Humildad y Paciencia, y otras imágenes.

El Señor de la Humildad y Paciencia recibe culto en la Parroquia de San Francisco Solano desde el año 1947. En 1991 es restaurado por el imaginero cordobés Miguel Arjona Navarro, quien también le colocó la actual corona de espinas tallada en madera e imitadora de su estado original, y le alarga las piernas para que dicha imagen quede proporcionada, ya que en su estado original tenia las piernas excesivamente cortas. Ese mismo año se adquieren, en orfebrería andaluza de Sevilla, unas nuevas potencias de plata dorada para la procesión, dejando las originales del siglo XVIII para diario.

A la derecha se muestra la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia antes de la restauración de 1991.